miércoles, 20 de enero de 2010

Síntomas tras 5 días sin trabajo

Por ahora he pasado por varias sensaciones, etapas, etc. Es relevante que éstos se suelen suceder drásticamente, los cambios entre una y otra son bruscos.

Rabia


Al fin y al cabo es un rechazo, aunque yo crea que es para bien. Quedé bien con la empresa, pero no me gustó cómo lo hicieron. Duró poco, ya me acuerdo poco de eso. Me centro más en mi propio presente y futuro y mis propias ideas.

Vacío


De repente todo el espacio que ocupaba el trabajo, que en mi caso era mucho o al menos más del que yo deseo para mis futuros empleos, desaparece para dejar un abismo negro al que uno debe asomarse. Hay unos momentos de pánico, de querer agarrarme a algo. Cuando perdí mi trabajo hace tres años, enseguida busqué otro: fue como un agarrarme a algo externo - en vez de indagar dentro de mí qué pasaba, y qué quería hacer realmente. Simplemente me dediqué a llenar el vacío con otra cosa parecida. Esta vez quiero sostener y atravesar ese vacío e ir adonde yo quiera. Nada de Ay quien maneja mi barca. Quiero manejar mi barca.

Alivio


¡Qué peso me he quitado de encima! También pasé por una etapa así, de una ligereza suprema. De hecho creo que es la sensación que más se ha quedado, aunque todavía hace poco y los cambios de humor todavía se suceden. Hay que mantenerla, porque es real. Si hay alivio es porque había presión - y a veces se tiende a compensar esta nueva situación... buscando una nueva presión. Si la hay, al menos que sea la que yo quiera.

Alegría


Normalmente expansiva. Ganas de compartir, hablar y ver a gente.

Paz interior


Muy, muy agradable por cierto. Hacía tiempo que no la sentía tan intensamente.

Miedo


Ayer tuve un miniacceso de este tipo, de pensar "estate que ahora es cuando se te va la cabeza". Me creó mucha angustia, pero lo pude sostener y me pude decir: me estoy engañando, hombre. ¿Ya estoy dándome por el ojete? Es esto contra lo que estoy luchando. Lo que no quiero repetir. Será difícil, pero es una buena causa.
El miedo que mayor angustia me causa es precisamente a la locura, que se puede traducir como el miedo a perder el control. A que se me vaya la pelota por hacer cosas raras... por hacer lo que me parece. Suelo buscar muchas veces lo raro simplemente por nuevo, no por bueno. Innovar por innovar, no por beneficiar. Es un impulso mío.
Otro miedo que me atenazaba, es que mis proyectos personales se vayan al garete, y que luego me encuentre después de un tiempo largo de no trabajar como las personas normales, sin carrera, oficio ni beneficio. Solo en el insondable y cruel universo humano. ¿Pero por qué esta visión apocalíptica? Está claro que es un miedo que me intenta parar de lo que quiero hacer, porque hacer lo que uno quiere, cuesta. Es un esfuerzo, y supongo que mi parte saboteadora no tiene putas ganas de hacerlo.

Hiperactividad


Me encuentro hiperactivo. Tengo miedo de que sea demasiado. Esta noche he dormido fatal, es la primera noche que duermo tan mal. Además he tenido un sueño muy raro donde dos tipos me robaban mientras estaba de viaje, por descuidos míos.
Me da por leer compulsivamente artículos de Pavlina o Malonda, a cada cual más interesante, pero llega un punto en el que ya leo por leer, no le saco el jugo suficiente a los artículos, y veo que me pongo a leer para no ponerme a hacer las cosas que yo tengo planeadas hacer, de nuevo un poco de saboteo. Estoy esperando a tener internet en el linux (no tiene potencia suficiente para robar wifi del vecino, pero la del laptop windows sí, por eso escribo desde éste pero para trabajar en proyectos de programación me da cosica). Esto es, espero el escenario ideal... excusa para no esforzarme. Tengo que tener cuidado con estas rebeliones para organizarme bien. Darles lo suyo, en parte, para que también yo pueda hacer lo mío y alcanzar un equilibrio. Represión no.

Sexualidad


No sólo me masturbo más (bueno, más... en los últimos diez días creo que no había habido ni una mala pajica...) sino que desde que he sido despedido, he tenido un fluir de energía sexual mucho más alto. ¡No sólo me vengo haciendo una al día al menos, sino que también he tenido sueños húmedos además! Esto sólo puede ser una buena señal. Y no es algo que me proponga, simplemente lo pide el cuerpo.
Bien es cierto que ayer, por ejemplo, justo después mi mente ya empezó a ponerse en plan hiperactivo, lanzando pensamientos ahora que el cuerpo estaba flojo. Eso me preocupa un poco, lo pondré en observación.
Creo que este fluir de energía sexual es sólo un indicio de la liberación y flujo de energía en general.
Supongo que esta energía explosiva inicial se reducirá mientras vaya alcanzándose una homeostasis general, pero bueno... mientras tanto, a disfrutar. Lo peor sería que se quede dentro. Semen retentium, pecatum est, decía Andrés Pajares a Carmen Maura en Ay Carmela.


tiempo de edición: 30 minutos

No hay comentarios: